El coste de lanzar un medicamento al mercado se ha duplicado en los últimos diez años. Este proceso se estima que cuesta unos 2.600 millones de dólares y tarda un promedio de 12 años. Además, la presión para que los nuevos medicamentos avancen más rápido es mayor que nunca. Parte del desafío es el gasto que suponen los ensayos de los medicamentos en las últimas etapas; pues suponen una inversión de varios cientos de millones de euros. En la actualidad se utilizan muchas estrategias para acelerar la llegada de los medicamentos al mercado. Por ejemplo, conocer las características químicas de un medicamento candidato lo antes posible en la fase de desarrollo; reducir la escala mediante el uso de la química de flujos y procesos continuos; adoptar una tecnología analítica de procesos y usar plantas de fabricación portátiles. Bruker ofrece una exclusiva gama de técnicas analíticas para la (bio)farmacéutica que generan los datos necesarios para acelerar el descubrimiento, el desarrollo y la fabricación de medicamentos, reduciendo al mismo tiempo el riesgo y el tiempo de comercialización.